viernes, 18 de septiembre de 2009

Rebeldía

Hay veces que cuesta hacer lo que se debe, hay veces que debes hacer cosas que no te gustan, son responsabilidades o normas que hay que seguir sin que puedas evitarlas o esquivarlas, ni siquiera cuando eres niño te libras de hacerlas, obedeces a tus padres o a la profesora y sabes que el no hacerlas tarerá consecuencias peores y te quedarás con el castigo y también harás las tareas, no te dejan alternativa.

La rebeldía no es recompensada, ni siquiera reconocida, ya que yo considero que desafiar a la autoridad es mucho más difícil que seguir las normas. Si te saltas una ley, serás juzgado o multado, si no haces lo que te ordena el jefe, serás despedido... Y así podríamos enumerar las consecuencias negativas que la rebeldía trae de la mano.

A pesar de saber todos esto y a pesar de llevar años y años acatando las normas, un poco adaptadas a mi estilo, eso sí, a pesar de comprobar por mi misma que a veces por mucho que cueste hay que hacerlo, a pesar de todo esto, la rebeldía se está apoderando de mi. No en general pero sí en particular. Hay algo que debo hacer, algo que es relativamente importante para mi, algo que no quiero hacer, no puedo, no estoy concentrada ni motivada, me está superando la tarea y lo peor es que no tengo el más mínimo interés en ella. Creo que estoy en otra fase, aunque sé que debo finalizar lo que empecé hace 1 año.

En realidad puedo abandonar, no pasaría nada, pero tengo una rebeldía tan retorcida que no quiero abandonar y quiero finalizarlo sin hacer los debeberes, esto no es compatible ...

Rebeldía ...... Sal de mi interior!

No hay comentarios: